Siguiendo el camino de la interoperabilidad

Autor: Ariadna Rius   /  6 de junio de 2018

La interoperabilidad es la capacidad de compartir información entre componentes (como sistemas o dispositivos) sin que se pierda su significado. Esta comunicación tiene que garantizar el intercambio coherente de los datos entre departamentos, organizaciones, niveles asistenciales o regiones, con el objetivo principal de proporcionar a los profesionales toda la información relevante de sus pacientes para asegurar que el proceso de toma de decisiones se produce de una manera segura, eficiente y eficaz y garantizando el acceso a la información independientemente del lugar en que se haya registrado. El SISCAT se caracteriza para presentar una gran diversidad en en cuanto a la utilización de sistemas, servicios y dispositivos por parte de los diferentes proveedores: esta heterogeneidad hace que sea necesario un trabajo intensivo de estandarización que permita lograr la interoperabilidad entre los diferentes agentes y actores.

Cuadro de temperaturas de la interoperabilidad SISCAT: Qué información intercambia electrónicamente y con qué instituciones (actualmente)?

 

La Fundació TIC Salut Social hace ya años que incluye el análisis de la interoperabilidad al Mapa de Tendencias para valorar el estado de los proveedores de salud en en cuanto a la adopción de las normas y herramientas que permiten lograrla. Desde el 2013, el uso tanto de estándares de HL7 cómo de los vocabularios controlados internacionales LOINC y SNOMED CT ha ido aumentando progresivamente, hasta situarse además del 70% en el caso de HL7, cerca del 50% en el de SNOMED CT y borde del 36% en el de LOINC. Los datos de este año también muestran una consolidación del uso de SNOMED CT no sólo por anatomía patológica sino en otros ámbitos como alergias o inmunizaciones. En relación a la interoperabilidad semántica, también hay que destacar el esfuerzo que están haciendo los proveedores para adaptarse al uso de CUMBRE-10-MC/SCP, requerimiento que tiene un elevado impacto tanto a los sistemas de información como a los procesos y a las metodologías de trabajo. En este sentido, más del 60% de los encuestados declara estar preparado por el uso de la nueva revisión de la clasificación. En cuanto al uso de motores de integración, este ya se ha situado borde el 60%, de forma que más de la mitad de los centros ya cuentan con las herramientas para estandarizar la mensajería utilizada en sus comunicaciones con terceros.

Los datos del Mapa confirman el incremento sostenido del uso de los estándares al SISCAT, donde cada año más centros los utilizan para intercambiar información con terceros, ya sea a través de HC3 o IS3. Así queda también patente en el llamado “Cuadro de temperaturas de la interoperabilidad SISCAT”, que muestra qué tipo de información se intercambia electrónicamente y con qué instituciones, enfatizando la importancia del intercambio para que los profesionales puedan informar de todo el que están haciendo y el resto de instituciones o niveles asistenciales puedan aprovecharse de la información para favorecer los diagnósticos de los ciudadanos.

El esfuerzo que los proveedores dedican a este tipo de adopciones repercute al mejorar la eficiencia, la seguridad y la toma de decisión en el proceso asistencial, poniendo al alcance de los profesionales la información relevante que necesitan en cada momento.

Nota: todas las cifras presentadas corresponden a datos recogidas a lo encuesta Mapa de Tendencias 2017. Estas cifras muestran una descripción no necesariamente representativa del grado de cumplimiento de los centros, de naturaleza heterogénea.

  • Los resultados de lo encuesta Mapa de Tendencias 2017